El episodio empieza a tope, con los hombres de Theon asaltando Invernalia y el pobre maestre Luwyn apurándose para mandar un último cuervo. Honestamente, creía que los piratas de los Greyjoy iban a liquidar al sabio pero el que sufre tan bellaco destino es Ser Rodrick y, aunque él muere con honor y nobleza, su muerte es salvaje. Antes de eso, Theon y Bran mantienen un extraño diálogo en el que el Kraken pide al Lobo que rinda el castillo. La rareza de la escena está muy bien conseguida: Theon y Bran han sido como hermanos durante muchos años, tiempo en el que Theon ha sido tratado casi como un igual por el resto de habitantes del castillo. En todas las secuencias en Invernalia, Theon demuestra ser un personaje interesante y complejo que no deseaba la muerte de nadie pero que tiene demasiado que demostrar.
En Desembarco del Rey, una seucesión de desencuentros acaba en un sangriento motín que sucede de manera muy natural. El pueblo hambriento increpa a su rey y algún valiente lanza un poco de mierda de caballo a la cara del rey, éste, por supuesto, reacciona con gritos y amenazas que sus soldados no pueden cumplir ante la marabunta y así se desata el caos. La muerte del septón es brutal (¿pretenderán comerse ese brazo?) y a Sansa parece esperarle un destino similar hasta que aparece Sandor Clegan y despacha a los tres violadores en potencia con una calma y tranquilidad que asusta un poco. Las palabras que dedica a la pobre Sansa, combinadas con sus actos, muestran las aristas de este extraño guardasespaldas.Uno de los grandes momentos del episodio es la reprimenda que Tyrion dedica al maldito Joffrey y por fín alguien vuelve a pegar a ese niño endemoniado. Lo malo es que ahora Joffrey trama alguna manera de vengarse, de eso no hay duda.
En el campamento de Robb, primero su madre y luego las malas noticias de Invernalia, interrumpen un flirteo bastante interesante con Lady Talissa Maegyr. Este personaje supone un cambio para con las novelas y no puedo evitar preguntarme si todo este tiempo que le están dedicando cambiará en algo el futuro de su trama.
Como era de esperar, a Robb no le sienta nada bien la traición de Theon pero es demasiado tarde para retroceder y no lo queda más remedio que confiar en el bastardo de Lord Bolton.
Una vez más, Arya tiene varias escenas brillantes en Harrenhal: el juego del escondite a plena luz con Meñique, las conversación íntima con Tywin (Tywin y Arya juntos son una maravilla) y el ruego a Jaqen quien, a pesar de no tener la obligación de ejecutar su promesa cuando Arya quiera, decide ayudarla y asesinar a Ser Armory Loch en el instante justo en el que se disponía a revelar a Tywin el secreto de la pequeña Loba. Esa secuencia de ruego y asesinato en la puerta es espléndida.
Más allá del muro, tras jugar un poco con Jon, Qorin lidera un asalto a una posición de los Salvajes. Allí conocemos por fín a Ygritte (otro gran casting) quien espera su ejecución con una mezcla de miedo y valentía muy interesante. La separación de Jon del resto del grupo es un poco artificial y no me acaba de convencer pero definitivamente vale la pena para poder ver ese momento en el que Jon e Ygritte tienen que dormir juntos. ¡Pobre Jon! Yo creo que esa noche no va a pegar ojo.
Al otro lado del mar, Daenerys vuelve a se despreciada por otro rey comerciante y cuando vuelve a la residencia de Xaros, descubre que Irri y muchos de sus hombres han sido asesinados para poder robarle los dragones. Imagino que todo esto es para ir limpiando la lista de personajes y para dar un motivo extra para visitar La Casa de los Eternos. No sé si esa motivación extra era necesaria pero seguro que implicará una serie de escenas muy interesantes.
Lo peor de todo esto es que ya sólo quedan 4 episodios más para que acabe la temporada. Menos mal que en breve sale el nuevo libro y podré disfrutar de más Canción.
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