Recientemente he tenido ocasión de leer los dos últimos tomos recopilatorios de Scalped publicados en España: Tienes que pecar para salvarte y Preparado para luchar. Estos dos tomos preceden al que será el último de todos, que llevará por nombre: El Fin del Camino. Esa lectura ha certificado la condición de estrella del sello Vertigo que, últimamente, no está en su mejor época. Scalped sigue haciendo malabarismos con un potentísimo género negro, una dura crítica social basada en la cruda descripción de una realidad que pocos conocen y aderezando el conjunto con una pizca del misticismo y mitología de los nativos americanos.
Estos dos arcos argumentales tienen en común la transformación positiva de los personajes que uno de ellos verbaliza diciendo "¿Crees que un hombre puede cambiar?". En los primeros tomos de esta fantástica serie, Jason Aaron mostró a una larga serie de personajes con más rasgos negativos que positivos (quizá la familia Oso Pobre o el agente Caído fuesen las excepciones), pero ahora muchos de ellos se han embarcado en una misión de mejora que no queda claro si es posible siquiera. Aaron parece afirmar que sí es posible pero no deja de matizarlo dedicando a algunos de esos personajes transformados un futuro ciertamente trágico y llevando por senderos oscuros a personajes que antes eran inocentes.
Scalped es una serie que no me voy a cansar de recomendar. No sólo da un pequeña vuelta a un género demasiado manido como el noir sino que además ambienta un interesante argumento en un escenario complejo, real y lleno de sutilezas como la reserva india de Prairie Rose.
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