De un tiempo a esta parte he descubierto que soy un apasionado de los géneros(entendidos como contexto más que intención). Soy humano y unos me gustan más que otros como la ciencia-ficción que probablemente sea mi género favorito pero casi todos tienen su momento: western, cine negro, fantasía...
Es muy fácil dejarse llevar por la idea de que estos géneros implican una película de entretenimiento que no puede competir en calidad con las obras maestras del cine. La imágen que preside el post representa la falsedad de ese pensamiento. Todos los temas y casi todas las ideas pueden transportarse a uno o varios géneros. En general, el género recubrirá a la película con sus propios méritos implícitos.
Mi debate interior trata sobre cuando usar un género y cuando no. La ausencia de contexto acerca las historias al espectador y eso no debe menospreciarse. La verdad es que se trata de un dilema más teórico que práctico pues cuando se me ocurre una idea, casi siempre lleva implícito un género y aún no me he encontrado con una idea con la que dude sobre el género que mejor pueda exprimirla. Pero todo el mundo tiene un género favorito, ¿no?
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