Acabo de leer la historia de Batman que ha escrito Neil Gaiman y que ha dibujado Andy Kubert. Y me ha encantado. Gaiman utiliza sus mejores armas para crear una historia antológica sobre, el que para mí es el mejor personaje de DC. La narrativa tiene ese toque mágico, bíblico que Gaiman dominó durante su grandioso The Sandman, y la usa para repasar, o mejor aún, reunir toda la historia de Batman en la parte de atrás del bar de Joe Chill. Durante el funeral, escuchamos como algunos personajes hablan sobre Batman y, aunque me hubiera gustado una intervención más larga del Joker, hay algunas como la de Alfred que son conmovedoras. El mito de Batman es tan amplío que es imposible utilizar todos los temas que el personaje carga a sus espaldas, pero Gaiman se enfrenta al nivel superior, a la esencia de Batman como personaje de cómic y a todo lo que eso implica y lo retrata perfectamente contando varias historias-que-no-han-sido pero que en el fondo siempre son, pues Batman sólo hay uno.
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