Mr. Nobody: extraños cuentos cinematográficos

Esta semana pasada en el comentario de Heavy Liquid, expliqué que tras leer el cómic me había quedado con la sensación de que Pope había escondido mensajes secretos que no era capaz de desentrañar completamente pero que se percibían en la historia. Bien, pues con Mr. Nobody me ha pasado algo parecido.
Esta película de Jaco Van Dormael, cuenta la historia de Nemo Nobody quien en los últimos días de su vida, allá por el año 2092, se dedica a rememorar todas las vidas que pudo tener basándose en las elecciones de toda una vida. De esta manera, se nos explican muchas historias, muchas vidas, que además acaban mezclándose con un cuento que el protagonista escribe cuando es joven. A pesar de lo aparentemente complejo de la trama, el guión, escrito por el propio Van Dormael, consigue guiarnos por esa telaraña de historias sin que perdamos el rumbo ni el sentido de la orientación. Se incluyen secuencias semi oníricas y científicas en las que los dilemas del protagonista se tornan en grandes preguntas universales sobre el cosmos, la naturaleza del hombre y de la realidad.
Sorprendentemente, el resultado final no es arrogante ni demasiado ambicioso por la manera en la que está narrado. Mr. Nobody no intenta inculcar ninguna verdad y ni siquiera tiene una moraleja clara. Más bien se dedica a mostrarte cosas bonitas y tristes, espectaculares y mediocres, un poco de cada cosa mientras juega con reflexiones sobre la memoria y las elecciones en la vida, tejiendo un cuento fantástico que te deja un extraño pero agradable sabor de boca. No os dejéis engañar por las etiquetas de esta película, si os gustan las buenas historias y necesitáis una dosis refrescante de cine, no os la podéis perder.